Definitivamente, en el 2015 la quinta generación del Espace rompió tradiciones. La concepción del coche monovolumen que se tenía hasta esa fecha, dio un vuelco total. ¿Y por qué? Porque el Espace llegó marcando hito con un modelo distinto: Era mitad crossover y la otra mitad era monovolumen deportivo. Ahora ya no hay vuelta atrás, la tradición está rota.

No es nada fácil tropezar con coche monovolumen que porte una estética parecida a la de nuestro protagonista Espace. Y si a estas características estéticas muy particulares, les adicionamos algo de su equipamiento técnico, nos queda como resultante un coche inigualable… pues, no vas a encontrar absolutamente nada que se le asemeje. Y eso que el segmento monovolumen ya tiene años en evolución constante.

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Renault Espace Zen Energy 1.8 TCE 225 EDC. Tecnología sofisticada

Nuestro protagonista de hoy, el Espace Zen Energy 1.8 TCE 225 EDC, ostenta un equipamiento tecnológico muy sofisticado que viene de serie. No cualquier coche puede igualar este tipo de tecnología. Por ejemplo, presume de 4Control dirección en las cuatro ruedas, además de combinarlo con un maravilloso cambio automático con doble embrague y siete relaciones, y por si pareciese poco le adicionamos una amortiguación pilotada y el sistema MultiSense.

Y no podemos dejar de mencionar sus muy apreciados 5 modos de conducción, los faros Full LED, los exquisitos asientos eléctricos con masajes, navegación en 3D, que las 5 plazas posteriores se abaten eléctricamente, o que por medio de las 8,7 pulgadas de pantalla táctil podemos controlar el equipo de sonido Arkamys. Y todo… absolutamente todo este equipamiento es de un nivel premium.

Más características premium

El Renault Espace Zen Energy 1.8 TCE 225 EDC, está apostándolo todo por ser un coche premium. Y lo ha logrado. Y como ejemplo tiene de premium hasta el espacio. La quinta generación del Espace viene equipado en su interior con siete plazas agrandadas para poder ofrecer un espacio interior aún más atrayente.

Las dimensiones se ven y se sienten cómodas, gracias también a que nuestro coche presenta de largo unos 4.857 milímetros y  unos 2.884 milímetros separan los ejes. Como reflejo de estas grandiosas dimensiones, podemos disfrutar de cotas realmente sorprendentes. Por ejemplo, tenemos que una gran altura en su fila tercera, superior incluso a la cota que porta el Talisman. Además, notamos que el ancho de la segunda fila presenta 2 centímetro extras que las que porta el Passat de Volkswagen.

Esta segunda fila porta plazas individuales, que se reclinan y deslizan. Además todos los asientos traseros, los cinco, se abaten eléctricamente desde controles desde el maletero.

En marcha…

Cuando tomamos a nuestro Renault Espace Zen Energy 1.8 TCE 225 EDC por el volante e iniciamos la marcha, ya a pocos metros de ella nos damos cuenta de su gran refinamiento. Presenta un exquisito y sorprendente silencio durante la marcha, y de forma general se siente la suavidad.

Nuestro Espace, realmente posee un motor potente y fino. Y sumándole que presenta un empuje de cuatro cilindros, pues… que más podemos pedir.  Y si podemos pedir más, porque a esto, nuestro protagonista le adiciona un delicioso cambio automático con doble embrague.

 Y como relativamente, haciendo comparación con rivales, es más liviano con 1.649 kilos, nos resulta un coche verdaderamente ágil. Una agilidad que se multiplica indiscutiblemente por el sistema direccional del eje trasero, y que lo ayuda en la optimización de la trazada, agradeciendo siempre el redondeo en curvas del 4Control.

Y como no todo es perfecto, si que añoramos que tuviera levas al volante y un poco más de huecos en su diseño interior para poder guardar muchos objetos del día a día.