El Edge 2.0 TDCI 4×4 Titanium es un coche amplio, dinámico, excelentemente rematado y muy confortable. Además de estar equipado de sistemas tecnológicos de gran avanzada. Definitivamente Ford nos trae un gran SUV para hacer su debut en Europa… y de qué forma…
Ford, tiene la costumbre de impresionarnos con modelos tan completos. Edge se une al equipo de la EcoSport y el Kuga. Es fabricado en Canada, y ya tiene años en el mercado de Norteamerica. Ahora llega haciendo su debut en Europa derrochando calidad, confort, dinámica y tecnología. Casi nada…
Recuerda, que para todo conductor, siempre es útil tener a la mano un Duplicado de llaves de coche
Ford Edge 2.0 TDCI 4×4 Titanium. Elegante y robusto
Su diseño exterior es innegablemente Americano, con una fuerte personalidad, siendo elegante y al mismo tiempo bastante robusto. Si indagamos en su interior, nos damos cuenta que su plataforma es compartida con Galaxy, S-Max y Mondeo, siendo el interior muy parecido.
Presenta una longitud de 4.81 metros. Lo que lo hace más largo entre los cuatro, pero sólo presenta cinco asientos. Claros, no hablamos de cualquier asiento. Se observa gran espacio en las plazas delanteras y traseras. Y ni hablar de lo cómoda de la plaza central, debido a que el piso es casi totalmente plano.
Una de las características de calidad prácticamente Premium es el sistema de Control Activo de Ruido. Este sistema se encuentra equipado con 3 microfonos posicionados dentro del habitáculo con el fin de detectar los ruidos desagradables. Cuando los ruidos son captados, el sistema emite ondas en sentido contrario, por medio de sistema de audio, sólo para contrarrestarlos. Parece película de ficción, pero en realidad funciona y se siente acústicamente un gran confort.
Otra de las características que distingue a la Ford Edge 2.0 TDCI 4×4 Titanium, es su cámara frontal. Claro, ésta viene incluida con un desembolso de 350 euros. Pero en realidad es necesaria, pues con la enorme trompa se nos obstaculiza un poco la visibilidad. La cámara frontal posee un ángulo de 180°, permitiéndonos observar a cada lado. En cambio, la cámara trasera, si viene incluida.
En la Ford Edge 2.0 TDCI 4×4 Titanium, podremos instalarnos cómodamente en nuestras plazas delanteras, calefactables por cierto, y si pasamos por caja, la podemos tener refrigeradas. Y en cuanto a guardar objetos, tenemos múltiples opciones para hacerlo, pues, tiene variedad de espacios. Y la guantera es un gran foso, con una gran profundidad.
Vemos un poco incomodas la ubicación de las tomas de conexión USB. Se encuentran en la consola del centro, pero están prácticamente escondidas, en un hoyo con tapa en el cual la mano entra.
Todo este gran diseño culmina en un espléndido maletero con una capacidad de 602 litros. Su portón presenta asistencia eléctrica, y de serie trae manos libres, lográndose activar el sistema solamente movilizando el pie. Exactamente bajo el paragolpes.
Conociendo el corazón
Ford siempre se ha caracterizado por presentar una alta dinámica en sus coches. Pero como bien es sabido, entre Europa y Norteamerica ay preferencias distintas, Ford ha ajustado ciertos puntos en la dirección y suspensión para hacer el debut como debe ser. Por eso también la presencia de las opciones diésel.
El Ford Edge se encuentra equipado con un motor diésel 2.0 TDCI con la fuerza de 180 caballos, por tanto aquí en Europa se debe unir a la caja manual de 6 relaciones. Puede que muchos pensemos que no es la asociación perfecta. Más sin embargo, podemos seleccionar la versión de 210 caballos con que presenta una transmisión PowerSift doble embrague.
Es que realmente la fase de recuperación no es su fuerte. Además las opciones de utilización no son diversas. Hay que buscar la ayuda del cambio con bastante frecuencia y eso que la palanca no brilla por su rapidez. En la palanca, los movimientos deben ser marcados a montones. Y desearíamos que el pedal del embrague sea menos duro. Definitivamente, esto significaría un poco más de trabajo cuando recorramos la urbe con mucho tráfico.
Pero, con todo, hablar del Ford Edge 2.0 TDCI 4×4 Titanium son palabras mayores. Es el mayor de los SUV. Fuerte imagen, estilo, elegancia, calidad casi Premium y un fabuloso confort. Posee un chasis solido que en conjunto con la tracción total le otorgan una excelente dinámica. Aunque lo preferimos con el cambio automático, pero sólo se encuentra la opción disponible para la versión con 180 CV.