Seat Tarraco 2.0 TDI 150 CV DSG-7 4Drive Xcellence…Grandes argumentos

Seat ha lanzado su nuevo buque insignia. Y… realmente nos consquistó a todos. Es un todocamino de siete plazas con argumentos de sobra para convencer al público. Su nombre es Tarraco y logra conjugar las líneas de un todocamino con las artes de un coche monovolumen.

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Hemos estado desglosando cada una de las características del Tarraco en el primer y segundo reporte. Ahora nos toca centrarnos en su mecánica diésel con el 2.0 TDI y una potencia de 150 CV.

«El Tarraco 2.0 TDI con 150 CV, tracción total y cambio DSG con un acabado Xcellence presenta un coste bastante competitivo en el mercado. Más aún, si tomamos en cuenta el fabuloso equipamiento que trae de serie. «

Seat Tarraco 2.0 TDI 150 CV DSG-7 4Drive Xcellence. Un coche suave y silencioso

Nuestro Tarraco viene equipado con propulsor a Diésel 2.0 TDI con una potencia de 150 CV. Es un motor bastante suave y silencioso. Aunque, notamos que al requerirse algún empuje extra, el motor responde de una forma muy justa. Al momento de acelerar, partiendo de cero, responde muy bien hasta que llega a las 3.000 revoluciones por minuto (modo Sport). Aunque, presenta dificultad para que la aguja del cuentavueltas llegue a 5.000 revoluciones por minuto, si es que llega. A este comportamiento tampoco ayuda el peso del vehículo.

Con todo esto, y considerando que quién compre un Tarraco, lo llevará normalmente cargado, sugerimos elegir la versión con el propulsor 2.0 TDI con 190 CV. Pues, esta version que solo presenta 8 kilos demás, presenta un consumo promedio homologado de 5,6 l/100 Km y gana por 2 segundos en el paso de 0 a los 100 Km/h. Y con todo esto, su coste solo presentará un extra de 1.620 euros. Excelente opción ¿verdad?

Bueno, el consumo homologado si se encuentra algo fuera de la realidad. Así que, quien compre un vehículo Tarraco TDI, independientemente que sea de 190 CV o de 150 CV, debe acostumbrarse a un consumo entre los 7,5 y los 8,5 l/100 Km. Siempre bajo condiciones normales de uso y carga.

¿Por qué?

Porque en estas situaciones, tanto el peso como la tracción total y el cambio automático, condicionan este aspecto. Pero, es algo que le ocurre no solo al Tarraco, es un factor que siempre afecta a los todocaminos con iguales características. Qué podemos decir… siempre existe un precio para tener todo, y… hay que pagarlo. Claro, también somos libres de tomar la decisión de inclinarnos por otra versión del Tarraco: también con 150 CV de potencia, pero con tracción delantera, cambio manual y 4,9 l/100 Km de gasto promedio.

Pero, que quede sentado como prueba, que nosotros seguimos apoyando incondicionalmente al diésel, cuando se trata de ususarios que pueden alcanzar y sobrepasar un recorrido de 25.000 Kilómetros al año. Los vehículos con estos motores siempre son recomendables. Son decisiones dentro de la lógica y la legalidad. Pues, nadie puede prohibir un moderno coche diésel y que se encuentra dentro del marco de la normativa vigente.

Muy competitivo

El Tarraco 2.0 TDI con 150 CV, tracción total y cambio DSG con un acabado Xcellence presenta un coste bastante competitivo en el mercado. Más aún, si tomamos en cuenta el fabuloso equipamiento que trae de serie. Su competitividad es tanta que deja en desventaja a su casi hermano, el Tiguan Allspace de Volkswagen. Pues, este Tiguan, aún teniendo el mismo motor, igual cambio y tracción, es 7.000 euros más costoso.

En definitiva, el Tarraco nos encantó. Aunque, su motor, el 2.0 TDI con 150 CV, a pesar de ser silencioso y suave, presenta en algunas ocasiones unas respuestas muy justas, incluso hasta cortas. Pero, es lo único que encontramos en su contra. En todo lo demás se posiciona en un coche de gran evolución.